martes, 27 de enero de 2009

Camaleón

Más vale que me ponga las pilas para postear porque si no nunca voy a ser una bloggera pro como zanoni o carolina “bestiaria” Aguirre.
Cosas que pensé en los últimos días: soy pobre, pero basta de ropa barata. basta de nylon o poliéster. desde ahora sólo optaré por géneros nobles como el algodón o el hilo, aunque me alcance para un solo vestido al año.
Otras resoluciones que he tomado son: dar de baja el gimnasio y en reemplazo empezar yoga (complementar con corridas al parque), alimentarme mejor (no coca, no doritos, no pepitos, aflojame con el queso). Frutas. Licuados. Pescados, eso sí.
Sigo anémica.
No tengo HIV.
Se me vencieron muchas órdenes y recetas y me da fiaca ir a buscar otras. tengo pendiente: eco transvaginal, eco mamaria, tratamiento de ortodoncia, tratamiento anti-acné.
También trámites, muchos: inscripciones, pasaporte, registro (se me venció, dejé pasar más de un año y ahora tengo que hacer TODO el trámite desde cero. (R tiene razòn cuando dice “Qué difícil es ser vos”).

El sábado fuimos a una fiesta y bailamos al aire libre, descalzos y atontados por el fernet y el calor. Los ramones, Bon Jovi, Erasure, Roxette, Culture Club. Mi infancia y parte de mi adolescencia comprimidas en la carpeta de una notebook.

(inicio del flashback)-------> Lo sé, es algo abrupto

Mediados de los ´80 en la Argentina, el dormitorio de una casa en los suburbios


C, nuestra protagonista, ya cumplió los 8 años. Algunos domingos va con su familia a la casa de sus tíos en Hurligham. Es una casa grande, confortable, y grandes y chicos se entretienen en el jardín jugando al criquet. En el cuarto de su primo G (anda por los 20), detrás de la puerta, está pegado este póster



C mira la foto, las trenzas, los párpados rosas, los ojos delineados. Le parece que es un chico, pero también le parece que si es un chico no se parece en nada a su papá.

Entonces tiene una especie de revelación: hay padres, hay madres, y también hay 1000 formas de ser diferente.

lunes, 12 de enero de 2009

Ayer

Jazmín (ocho años), una de mis cuatro sobrinas, intentando explicarle a una amiguita suya quien era yo: "Ella es Ceci. No es una mamá como todas. Es como si fuera todavía una....hmmm....una...¡adolescente! ¿entendés?

***
Al rato, le pregunto: Jazmín, por que andás diciendo por ahí que soy una adolescente?

J: Es que vos te haces tatuajes, usas malla toda entera, así como nosotras, no sos como las otras mamás.

jueves, 8 de enero de 2009