la pobreza (temporaria, espero) por el momento me entretiene. busco formas de cocinar barato, divertirme barato, viajar barato.
arvejas, garbanzos, albahaca del balcón, huevos, palta sólo si me dan 2 a tres pesos con cincuenta. ¡jamas pagaré siete pesos por ese 1/4 de cerezas, vil verdulero! por más rojas, grandes y de Mendoza que sean. en estos dias, soy la Ecónoma del Once, una lita de lazzari cualquiera.
a los taxis, ves, ya ni los miro. subte y colectivo a todos lados y en todas las combinaciones posibles, A con D con C con 115 con 95, me cruzo toda la ciudad. y cuando no, camino (la pobreza tonifica).
siempre tendremos la música, que es gratis. y el sexo, que también es gratis. y todos los libros que alguna vez compramos porque nos sobraba la plata pero no leímos porque no nos sobraba el tiempo.
ahora es el momento.